Una vez montada las exposición dejamos un tiempo para que todos pudieran ver tranquilamente los distintos ejemplares de setas.
Una vez oscureció, y todos los asistentes al curso hubieron regresado al campamento después de sus excursiones vespertinas, comenzamos a explicar con detalle cada uno de los ejemplares recolectados, como distinguirlos de otros que puedan llevar a confusión, características principales de cada genero, comestibilidad, otros usos, leyendas, mitos o falsas creencias de algunas especies. Además de cualquier duda o consulta que surgió en ese momento.
Una vez terminadas las explicaciones y antes de dar comienzo a la cena, pudimos disfrutar de una pequeña degustación de dos especies distintas de setas. El primero fueron unas senderuelas (Marasmius oredades) salteadas con ajo y perejil; y el segundo fueron Barbudas (Coprinus comatus) al graten.
Y con esta cata micogastronómica, dimos por finalizado el primer día de las jornadas. Ahora tocaba cenar y descansar de un largo, pero divertido día, donde creo que todos los participantes pudieron disfrutar de las setas de la Sierra Norte.
El domingo mas ........
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